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21 de julio de 2010

RELATOS URUGUAYOS 1

RELATOS   URUGUAYOS
PARTE  I


NUNCA PENSÉ CONOCER ESE PAISITO



Nunca pensé en visitar ese pequeño país... ni siquiera sabía dónde quedaba, pues lo que recuerdo de los concursos de geografía de la primaria, en cuanto a Sudamérica eran sólo: Brasil, Argentina, Chile, Bolivia y Perú... pero nunca recordé dónde quedaba Uruguay... incluso lo confundía con Paraguay (se parece un poco el nombre ¿no?)

Recordaba a Brasil por Pelé y su enorme territorio... es difícil no verlo en un mapa. Argentina, pues por lo sangrones que siempre –a los mexicanos-- nos han parecido los originarios de ese país. A Chile lo recuerdo porque mi maestra de música era chilena... por el nombre de Pinochet (que para mi era como Pinocho) y por la forma tan alargada que tiene su geografía. Recordaba a Bolivia porque no tenía salida al mar y me parecía raro –Y MUY FEO- un país sin playas... será porque aquí tenemos playas extensas, bonitas y cercanas. Recordaba a Perú por Los Incas y porque, como dijo un compañero, eran los inventores de las papitas fritas (así dijo).



Pero Uruguay, nunca supe dónde quedaba. Hasta la secundaria, en geografía también, estudiamos las monedas y las banderas. La de Uruguay me parecía muy sencilla, extraña, un poco infantil (por el solecito con cara de optimismo) pero alegre y simpática. Ya en ese nivel escolar supe que Uruguay es diferente a Paraguay. Pero nunca pensé en que algun día andaría por allá.


LOS EXTRAÑOS Y SORPRESIVOS CAMINOS DE DIOS

Siendo ya sacerdote, aquí en Aguascalientes, me encargó mi Obispo –Don Ramón Godínez Flores-- iniciar la Pastoral de Adolescentes de la Diócesis. Pero antes, me “dió” el movimiento EPA (Encuentros Para Adolescentes) que iniciaba, traido de Guadalajara. El coordinador diocesano de EPA (Luis Guadalupe León Méndez) en esos años 2000-2002 hizo una página “web” del Movimiento (hasta la fecha por ahí anda la pobre página navegando ociosamente por el cyberespacio, con datos viejos y obsoletos) y por ello un día me llega un correo del P. Freddy Martínez de la Diócesis de Melo, Cerro Largo en Uruguay. Me sorprendió que alguien de otro país se interesara en nuestro Movimiento.

En tal correo el P. Freddy me felicita por el Movimiento, por la página y me pregunta si, en un momento dado, estaría yo dispuesto a trabajar allá, en la Pastoral de Adolescentes, también. La respuesta, de cajón: Pues si es la voluntad de Dios ¿Por qué no? En realidad no pensé que algún día se dieran las condiciones para ir. Estaba muy lejos.

Seguí en contacto con el P. Freddy por mail. Y un día inesperadamente creo en 2003, me invita a visitar su paisito, en miras a tal vez trabajar allá: La Diócesis de Melo (Departamentos de Cerro Largo y Treinta y Tres) pagaría los boletos de avión y, además, podría llevar a otro sacerdote conmigo. Lo comenté con el Sr. Obispo y estuvo de acuerdo: Fuímos el P. Daniel Cuéllar y yo. El viaje fue emocionante; es cierto que ya conocía Estados Unidos y Canadá, pero viajar “para el otro lado” es decir al Sur, era en verdad algo nuevo.

Recuerdo bien que viajamos en una aerolinea brasileira muy buena que creo ya no existe: Varig. Fue un viaje largo.... Primero Aguascalientes a México, DF. De ahí a Sao Paulo sin escalas. Yo no se si el P. Daniel alguna vez había viajado en avión, pero iba con cara de asustado, sobre todo en los despegues y aterrizajes. Si se veía un poco nervioso pero al mismo tiempo emocionado. El avión era muy grande de esos que tienen filas de asientos enmedio y a los lados... un boeing muy grande, no recuerdo el modelo.



Sao Paulo, desde el aire, impresionante y majestuoso. Vimos la estatua de Cristo Rey que domina la ciudad. Llegamos “molidos” por tantas horas de vuelo... creo que unas 8 más o menos. Y tuvimos el primer problema: Por ser mexicanos necesitábamos visa para estar en Brazil. No nos dejaron recoger nuestras maletas los “amigables” Brazileiros... y un poco tarados porque no “entendían la situación”. Finalmente una aeromoza de Varig --muy linda por cierto-- tuvo compasión de nosotros y nos trajo nuestras maletas... ya un poco saqueadas, pero bueno, nos dejaron la ropa al menos y se quedaron con algunas botellas de Tequila y dulces y alguna loción y no recuerdo qué más.

Y de ahí tomamos el vuelo para Montevideo, en otra aerolinea que nunca había oido existiera: PLUNA. Si leíste bien PLUNA, no pluma. ¿Y sabes que significa PLUNA? Bueno pues te saldrá una hernia en el estómago de tanto reirte del nombre un poco “complicado”. Es “Primeras Líneas Uruguayas en Navegar Al exterior”... breve el nombre ¿verdad?. Muy buen servicio también. El viaje un poco accidentado por las ráfagas de viento... ¡Dios mío, que lleguemos pronto por favor¡.



AL FIN LLEGAMOS¡¡¡

En el Aeropuerto Internacional de “Carrasco” nos recibió el P. Freddy. Era un aeropuerto pequeño... un poco más grande que el de Aguascalientes (¡imagínate¡) apenas un poco más moderno... Ya ahora es otra cosa; mucho más grande, moderno y renovado. El Padre Freddy nos saluda muy cordialmente. Él muy propio con su alzacuello clerical, muy amable... pero cargando una cosa que yo nunca había visto: Un termo y un vaso de veladora pequeña con cubierta de cuero... con agua caliente y una yerba molida que parecía orégano... era un Té. Y se lo tomaba con un tubo delgado de metal. Pensé si se valdría haber traido biberón... de haber sabido¡¡¡¡. Bueno ya después supe qué era todo eso: Una matera, una bombilla y el mate... y el termo. El tubo metálico recibe el nombre de bombilla. Y los días siguientes con mucha risa vi cómo TODO MUNDO traía eso y tomaba de eso. En los hospitales había un letrero que me llamó la atención: SE PROHÍBE TOMAR MATE.


El Aeropuerto al estar a las orillas de la ciudad está también en dirección a la carretera hacia Melo, de modo que no llegamos a Montevideo, pues apenas nos alcanzaría la luz del sol para llegar a nuestro destino. Me impresionó lo verde de los campos, los muchos arroyos que vimos por el camino, vacas y vacas y más vacas. Pueblos pequeños, con nombres extraños para nosotros: Sarandí de Mataojo o una cosa así, Minas, Treinta y Tres (¿por qué mejor no treinta y cuatro o cuarenta?) Y finalmente Melo.


(CONTINUARÁ)

PBRO. ROBERTO SÁNCHEZ DEL REAL.

1 comentario:

  1. El Treinta y tres es por los treinta y tres orientales. Acá te dejo el link...

    http://es.wikipedia.org/wiki/Treinta_y_Tres_Orientales

    Sos muy entretenido, a proposito, soy Argentina.

    Saludos

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